La Bioneuroemoción en las empresas

En la actualidad, el norte de las empresas de cualquier índole, es emplear métodos sujetos a la vanguardia para alcanzar la transformación como organismos inteligentes emocionalmente, ya que el éxito de la misma no recae sólo en la operatividad responsable de sus empleados, sino en una responsabilidad emocional cuya importancia es trascendental y que hasta ahora había sido subestimada. 

En un empresa, serán más productivos esos empleados que saben cómo canalizar de manera efectiva sus emociones y de esta forma superan los posibles conflictos diarios, a diferencia de donde es primordial la técnica, la responsabilidad racional o operativa. Todo sustentado en que todo lo que realizamos a diario está sujeto a nuestras emociones, por lo que ellas son el motor que nos lleva a avanzar promoviendo el bienestar y la salud. 

Contar con una inteligencia emocional congruente nos encamina a mantener los nervios encausados, a manejar de manera propicia los conflictos, a administrar de una forma adecuada las incertidumbres, herramientas que no las brinda la experiencia en el trabajo, si no la inteligencia emocional de cada trabajador. 

Según diversos estudios e investigaciones, indican que al menos un 75% de las respuestas erróneas de los empleados no es debida a una capacidad técnica disminuida, sino que tienen origen en una actitud no canalizada o en una inadecuada gestión de los conflictos. Además es de destacar que el 6,5% de mujeres y el 3,5% de hombres acotan que padecen problemas depresivos o de ansiedad, de los cuales un 60% acota que el trabajo ha sido el detonante de los mismos, sabiendo de que el éxito de toda organización se encuentra sujeta de manera intrínseca a la forma en cómo se manejan los sentimientos y creencias de quienes trabajan en ella. 

Actualmente ya se reconoce que muchos de los riesgos psicosociales son la ansiedad, el estrés o el desgaste, son factores que conducen a eventuales problemas físicos, pero que a corto plazo los síntomas que nos alertan de ello son los dolores en la musculatura, problemas con el sueño, dolores de cabeza, calambres, entre otros. 

La Bioneuroemoción toma esta situación para brindar apoyo a través de sus herramientas, sustentado en el concepto que se maneja de medicina para el trabajo por la Organización Mundial de la Salud como: “La especialidad médica que, actuando aislada o comunitariamente, estudia los medios preventivos para conseguir el más alto grado de bienestar físico, psíquico y social de los trabajadores, en relación con la capacidad de éstos, con las características y riesgos de su trabajo, el ambiente laboral y la influencia de éste en su entorno, así como promueve los medios para el diagnóstico, tratamiento, adaptación, rehabilitación y calificación de la patología producida o condicionada por el trabajo”.                  

Solo cuando la situación en las empresa comienza a tambalearse y a agravarse, es cuando éstas recurren a la medicina convencional, aunque esto podría haberse prevenido con antelación. Es aquí donde subyace la importancia de la gestión emocional con herramientas que funcionan en conjunto con la medicina convencional y cuyo fin es potenciar el bienestar y por ende la salud de los trabajadores y estos más satisfechos con lo que hacen. 

Reflejados en este contexto, la Bioneuroemoción se proyecta como una herramienta con increíble potencia a cargo de especialistas orientados por su creador Enric Corbera con la cual las personas son capaces de gestionar una amplia gama de dificultades alcanzando cambios realmente positivos en su vida de la forma más adecuada, saludable y resolutiva. 

Cuando a salud emocional hacemos referencia, Enric Corbera surge a la palestra como uno de los más reconocidos pensadores a nivel mundial, siendo un icono en cuanto a salud emocional y con ello al desarrollo personal. Toda esta posición se sustenta en más de 20 años de estudios relacionados con la relación del cuerpo, las emociones y la mente desde diferentes corrientes que van desde las más espirituales, hasta las más científicas. 

Para Enric Corbera Institute, la Bioneuroemoción se trata de un método que tiene sus raíces en diversas disciplinas filosóficas, humanistas y científicas a través de las cuales se ofrece una profunda comprensión de lo que nos acarrean nuestros conflictos emocionales. Gracias a este enfoque de las emociones, la Bioneuroemoción ha pasado a ser una herramienta de incalculable valor cuando de gestión de emociones se trata, sobretodo si se maneja en el sector empresarial y ello es debido a que con mayor convicción se está empleando en empresas que desean que sus trabajadores alcancen un impacto trascendental y positivo y con ello en la sociedad. 

Este método se encuentra evolucionando en los tiempos que vivimos para avanzar firmemente en el estudio del manejo de las emociones y su toma de conciencia. Y es por ello que al emplearse en las empresas nos facilita la interrelación con el entorno y con nosotros mismos, apartando juicios y justificaciones. 

Para la Bioneuroemoción existen dos tipos de organización en términos generales. La primera es la que se encuentra inmadura emocionalmente, y la siguiente es la que se conforma de una manera emocionalmente inteligente. Con respecto a la primera, éstas están llevadas a experimentar efectos laborales enfocados de manera negativa por lo que afectan su competitividad. Se encuentran definidas por una comunicación interna que se ha dañado en el tiempo debido a una mala canalización de las relaciones interpersonales marcadas por una disminución en su productividad, ya que la calidad de su trabajo y su rendimiento no son los más óptimos.

En estas empresas encontramos patrones:

  • Se suele responsabilizar a la empresa por las situaciones que suceden a nivel personal.
  • La rotación laboral y el absentismo están a la orden del día. 
  • El estrés y la depresión determinan la aparición de problemas de salud. 
  • La autoridad se encuentra en constante disputa con los empleados. 
  • Las reuniones que se generan no son centros de acuerdos. 
  • No se alcanzan soluciones sino culpables. 
  • Las críticas no son aceptadas. 
  • La comunicación suele ser pasivo-agresiva.
  • Las diferentes convicciones u opiniones son la razón de muchas de las negativas para trabajar.

Tenemos de manera generalizada la proyección de nuestras emociones, creencias, juicios y sentimientos para crear las experiencias que vivimos, y es por ello que cada una de las experiencias que vivimos, la extrapolamos al lugar de trabajo con nuestros compañeros reflejando aspectos desconocidos de nosotros mismos y que son el reflejo de nuestro entorno emocional familiar. 

Enric Corbera Institute se enfoca en cuatro vertientes que resaltan con las que puede ayudar a las personas a sentirse dueñas de sus lugares de trabajo, empoderadas para alcanzar una mejor salud emocional. 

  1. Estrategias de regulación emocional y herramientas para gestionar el estrés 

  • Tener un conocimiento profundo de lo que significa el estrés con lo cual se puede identificar los factores psicológicos que lo mueven. 
  • Comprender cómo la percepción del estrés afecta la salud de las personas y por ende a su bienestar. 
  • Poder emocional y en el comportamiento de las palabras. 
  • Los conflictos tienen fácil resolución a través de la empatía y la escucha activa. 
  1. Explorar las creencias y motivaciones para identificar el potencial de cada individuo 

  • Reconocer que las creencias que se instalaron en la fase inicial de nuestras vidas son limitantes y podría estar afectandonos en la actualidad. 
  • Comprender los bloqueos y los procesos internos de cambio. 
  • Conseguir y consolidar esa motivación innata de las personas. 
  • Llegar al autoconocimiento para mejorar la autoestima. 
  1. Aprender que proyectamos hacia los demás virtudes o defectos que solo son exclusivos nuestros. 

  • Influencia en nuestra vida de la percepción e interpretación. 
  • Liberarnos del victimismo emocional a partir de la comprensión del mundo como una forma de liberación. 
  • Comprender que nuestra forma de interpretar todo es lo que nos condiciona, por lo que se debe reconocer, identificar y modificar. 
  • Alcanzar la capacidad de gestionar nuestros conflictos comprendiendo nuestra percepción subjetiva que nos condiciona. De esta manera, entrar en reflexión sobre la responsabilidad en el conflicto y nuestra capacidad transformadora. 
  1. Reconocer los roles que se repiten tanto en la empresa como en la familia

  • Cambiar nuestra percepción del pasado para identificar nuestras reacciones en el trabajo. 
  • Comprender que la personalidad se crea a partir de la influencia de la familia. 
  • Identificar los conflictos de la infancia como influencia determinante en el entorno laboral. 

La manera de que la empresa reconozca que un organismo es emocionalmente inteligente es a través del reconocimiento de sus debilidades y fortalezas. Después de alcanzar el trabajo emocional en cada empleado, los resultados son compartidos con la gerencia con lo que se desea alcanzar una conciencia de la situación emocional de la misma para trabajar sobre las dinámicas de estrés que se encuentran debilitando el funcionamiento de la misma y la manera en cómo dichas situaciones repetitivas afectan el futuro de manera directa.  

A través de la Bioneuroemoción las empresas implementan las oportunas modificaciones para potenciar su capital humano y con ello su apertura al mercado. Para ello se deben alcanzar los siguientes objetivos:

  • Emplear la asertividad para alcanzar la expresión de frustraciones y con ello menos conflictos y relaciones saludables. 
  • Expresar las emociones respetuosamente para ser creíbles y generar espacios de confianza. 
  • Promover la empatía, mejorar la observación y la escucha activa para una mejor comprensión de las emociones. 
  • El ambiente laboral cambia cuando se le brindan herramientas a los empleados que promueven la autogestión de conflictos para reducir las tensiones y evitar futuros problemas de salud. 
  • Un espacio saludable en el ámbito emocional hace que las personas se sientan libres de expresarse y relajadas, por lo que se conducen a un proceso innovador.

Conclusión

Siendo nuestro lugar de trabajo el sitio donde transcurre el mayor tiempo de nuestras vidas, lo ideal es que sea una prioridad invertir en la salud de sus empleados y de esta manera  las empresas se convierten en organismos emocionalmente inteligentes, flexibilizando la forma de pensar para aperturar posibilidades nuevas a diferentes experiencias. 

Cuando se incide en la percepción del individuo de manera positiva, esto favorece su bienestar emocional y en consecuencia el estado físico, social y psicológico. El fin último de la Bioneuroemoción, es brindar una variada gama de recursos a las personas y de esta manera los empleados dejen de sentirse víctimas de lo que les sucede, para comenzar a verlo todo de una manera distinta.

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